Categorias: Eventos, Procesos y sostenibilidad, Proyecto educativo 08/07/2025
Neteja microplàstics a la platja de Gavà

La amenaza de los microplásticos

El pasado 19 de octubre, un grupo de unas 40 personas, y alrededor de 10 niños, dedicamos parte de la mañana a limpiar de microplásticos la playa de Gavá y proteger el medio ambiente. En menos de una hora de limpieza, conseguimos recoger aproximadamente 2 kg de residuos en un tramo de unos 100 metros de ancho. Entre los desechos, encontramos multitud de microplásticos. Entre ellos, destacan pélets (pequeñas bolitas de plástico), fragmentos de plásticos troceados, tapones de botellas, decenas de colillas de cigarrillos, numerosos palillos de plástico para las orejas… Incluso hilos de pescar y objetos más grandes como una lata de alimentos en conserva y un plato de cerámica. Esta acción nos recuerda la urgente necesidad de seguir cuidando nuestro entorno y reducir la presencia de microplásticos en nuestras playas y nuestros mares.

La presencia de residuos, especialmente los microplásticos, en las playas como la de Gavá es un problema grave. En 2022, varias entidades ecologistas recogieron hasta dos millones de microplásticos de las playas de Vila-seca, provincia de Tarragona. De hecho, hace muchos años que los pélets están afectando la playa de la Pineda y otros puntos de la Costa Dorada. En paralelo, las playas barcelonesas de Sant Sebastià, la Nova Icària y Llevant son las que tienen más microplásticos de toda Cataluña, según un estudio reciente de la Universitat de Barcelona. La configuración de las playas resguardadas por los espigones, el viento y el oleaje contribuye a retener y acumular estos materiales, mientras que en otros territorios son arrastrados mar adentro.

Microplàstics a la platja de Gavà

Però, ¿qué son los microplásticos? 

Los microplásticos son fragmentos de plástico de menos de 5 mm que provienen de dos fuentes principales. Por un lado, los microplásticos primarios, se introducen directamente en el medio ambiente en forma microscópica. Por el otro, los microplásticos secundarios, que se generan a partir de la fragmentación de piezas plásticas más grandes.

  • Los microplásticos primarios incluyen, por ejemplo, las micropartículas utilizadas en productos cosméticos como exfoliantes. Pero también las fibras sintéticas que se desprenden durante el lavado de ropa hecha con materiales plásticos. 
  • En cambio, los microplásticos secundarios se forman por la degradación de bolsas de plástico, botellas, redes de pesca y otros materiales. Esta degradación es producida por la acción de la luz solar, el movimiento del agua y factores ambientales.

Una vez liberados en la naturaleza, las corrientes oceánicas, el viento y otros fenómenos permiten que estos microplásticos se dispersen ampliamente. Pueden llegar incluso a zonas remotas como el Ártico o la Antártida. Esto hace que su impacto sea muy difícil de contener y abordar, ya que pueden viajar miles de kilómetros desde su fuente original.

Los pélets, microplásticos de difícil gestión

Una fuente importante de microplásticos son los pélets de plástico, pequeñas bolitas utilizadas en la fabricación de bolsas, cables, botellas y muchos otros productos. Suelen estar compuestos por materiales como polietileno, polipropileno o PVC, lo que dificulta enormemente su degradación. Se calcula que pueden tardar muchos años en descomponerse, un hecho especialmente preocupante debido a su alta persistencia en el medio ambiente.

Diversos grupos ecologistas han denunciado que el problema de los pélets está presente en toda su cadena de valor. Desde su producción, almacenamiento y transporte, hasta su uso y gestión como residuo. De hecho, la organización europea Plastics Europe cuenta con un programa llamado Operation Clean Sweep® (OCS) para reducir la pérdida de estos microplásticos tan problemáticos.

En este sentido, cabe destacar la crisis medioambiental que sufrió la costa gallega en enero de 2024. La llegada masiva de toneladas de pélets de plástico supuso un grave problema para el medio marino. Procedían de seis contenedores que se desprendieron de un buque de carga polaco. El incidente se produjo a mediados de diciembre de 2023, mientras navegaba frente a la costa portuguesa.

Efectos de los microplásticos en la vida marina y riesgos para la salud humana

La presencia de microplásticos en los océanos afecta a diversas especies marinas, desde los organismos más pequeños de la cadena alimentaria. Algunas de estas especies son el zooplancton, hasta los grandes depredadores, como los mamíferos marinos y las aves. Muchos animales confunden estos pequeños fragmentos con alimento, los ingieren y los acumulan en sus sistemas digestivos. Esto puede provocarles una serie de problemas de salud. Algunos de estos problemas son las obstrucciones en el sistema digestivo, reducción de su capacidad reproductiva, así como fenómenos de bioacumulación y biomagnificación.

Aunque todas estas consecuencias son devastadoras, la bioacumulación y la biomagnificación nos afectan directamente como consumidores de pescado. Los microplásticos contienen sustancias químicas tóxicas que pueden transferirse a través de la cadena alimentaria. Cuando los animales más pequeños son ingeridos por depredadores de mayor tamaño, estas toxinas se concentran, alcanzando niveles potencialmente peligrosos para los organismos situados en la cima de la cadena, incluidos los seres humanos. Los efectos a largo plazo de la ingesta de microplásticos todavía están siendo estudiados. No obstante, ya hay indicios de que podrían contribuir a problemas hormonales, inmunológicos e incluso aumentar el riesgo de ciertas enfermedades.

Soluciones y alternativas para combatir los microplásticos

Aunque la lucha contra los microplásticos es compleja, existen diversas estrategias para reducir su presencia en los océanos:

  • Reducción de plásticos de un solo uso. Las políticas de reducción y prohibición de productos plásticos desechables, como bolsas y botellas, pueden ayudar a disminuir la cantidad de residuos que acaban en el mar.
  • Mejora de los sistemas de gestión de residuos. Invertir en tecnologías de reciclaje más eficientes y en sistemas de gestión de residuos sólidos puede limitar el vertido de plásticos en entornos naturales.
  • Investigación en materiales biodegradables. Desarrollar materiales alternativos que se descompongan sin dejar residuos tóxicos es fundamental para reducir el impacto de los microplásticos.
  • Sensibilización pública y educación ambiental. Concienciar a la sociedad sobre la importancia de reducir el uso de plásticos y fomentar buenas prácticas de reciclaje es clave para lograr un cambio global.

¡Concienciación y acción!

Los microplásticos representan un problema medioambiental complejo y peligroso que afecta no solo a la vida marina, sino también a la salud humana y la economía global. Su eliminación de los océanos es una tarea difícil, pero con el compromiso de gobiernos, empresas y ciudadanía es posible minimizar su impacto. Sin duda, el futuro de los océanos depende de las acciones que tomemos hoy para frenar la contaminación por microplásticos y proteger estos ecosistemas esenciales para la vida en el planeta.

Con esta primera iniciativa ReCrea y Acción hemos querido concienciar sobre la amplia presencia de estos residuos en nuestro entorno. Solo siendo conscientes de esta problemática podremos actuar para revertirla, porque todas las personas podemos ser agentes de cambio social.

Muchísimas gracias a todas las personas que participasteis. También a nuestros colaboradores, que hicieron posible la jornada con la provisión de material para la recogida de residuos y también para el desayuno. Pasamos una mañana muy bonita.

¡Hasta pronto!

Colaboran: Ajuntament de Gavà · Proquibsa · Bunzl Distribution Spain · Fruita VIPS · Begudes del Vallès · Pedial · Sunset Pastisseria