Amistad infantil y salud emocional

Llega el fin de curso. ¿Qué hacemos?

El fin de curso es un momento muy especial para los niños y niñas, puesto que marca el cierre de una etapa llena de aprendizajes y vivencias compartidas entre amigos y amigas. Durante este período, los niños y niñas pueden experimentar una mezcla de sentimientos. Por una parte, alegría por las vacaciones de verano que se acercan. Por la otra, tristeza por la separación temporal de los compañeros y compañeras de clase. 

Hay que tener en cuenta que las amistades que se forman a lo largo del curso escolar son muy importantes para las infancias. Esto es así porque, con ellas, se comparten momentos de juego, estudios, y crecimiento personal. Por eso, mantener estos vínculos durante las vacaciones puede ser esencial para el bienestar emocional de nuestros hijos e hijas. 

Aquí, las familias pueden jugar un papel crucial para asegurarse que los niños no pierdan el contacto con sus amigos durante el verano.

Actividades de verano para fomentar encuentros entre amigos y amigas del cole

Para compensar la posible tristeza que puede acompañar el fin de curso, las familias pueden organizar varias actividades que permitan a los niños y niñas mantenerse en contacto con sus amigos y amigas. Aquí os dejamos algunas ideas: 

• Programar encuentros regulares: Organizar encuentros semanales o quincenales para que los niños y niñas se puedan ver y jugar juntos. Algunos lugares ideales para ello pueden ser los parques, las piscinas e incluso nuestra propia casa. 
• Actividades en grupo: Inscribir a los peques  en actividades de verano como casales, campamentos, talleres o cursos a los que puedan ir con sus amigas y amigos. Esto no solo mantiene el vínculo, sino que también les proporciona nuevas experiencias conjuntas.
• Tecnología: Aprovechar las ventajas que nos brindan las herramientas tecnológicas tales como las videollamadas o las redes sociales para mantenerse en contacto cuando los encuentros presenciales no sean posibles. Esto puede ayudar a aliviar la sensación de separación.
• Proyectos en común: Animar a los niños y niñas a trabajar en proyectos en común, como crear un club de lectura, escribir una historia conjunta o iniciar un pequeño huerto urbano. Esto fomentará la conexión y se mantendrán enfocados en  un objetivo compartido.

El papel crucial de las amistades infantiles en la salud emocional y la propia identidad

Prestar atención a las amistades de nuestros hijos e hijas es importante para su salud emocional. La amistad en edades tempranas es fundamental para su desarrollo emocional. Estas primeras relaciones ayudan a construir su autoestima, a desarrollar habilidades sociales y a comprender mejor el mundo que los rodea. 

Cuando los niños y niñas establecen amistades en el colegio, no solo comparten juegos y risas, sino que también aprenden a gestionar los conflictos. También aprenden a comunicarse de manera efectiva y a dar y recibir apoyo emocional. Estas experiencias son esenciales para que aprendan a reconocer y a expresar sus propias emociones, pero también para empatizar con los sentimientos de los otros.

A menudo, estas relaciones se mantienen a lo largo de los años. Las amistades que se forjan en los primeros años de vida pueden convertirse en lazos profundos que perduran en la edad adulta. Cultivar estas amistades es un tesoro, puesto que nos aportan un sentido de continuidad y seguridad. Las amigas y los amigos de la infancia nos conocen en nuestra esencia más pura. Han vivido con nosotros momentos clave de nuestro crecimiento y nos aceptan tal y como somos.

Conservar amistades de la infancia en la edad adulta puede ser un gran apoyo. Estas amistades entienden nuestra historia y nuestras raíces, cosa que facilita una conexión más auténtica y profunda. Compartir recuerdos y experiencias del pasado refuerza el vínculo y nos ayuda a mantenernos conectados con nuestra propia identidad. Así, las amistades de la infancia no solo nos aportan alegría y compañía, sino que también juegan un papel crucial en nuestra salud emocional a lo largo de toda la vida.

Apoyo y reconocimiento del vínculo entre la amistad infantil y la salud emocional

Es fundamental que las familias reconozcan y validen las emociones que el fin del curso puede generar en los niños y niñas. Por ejemplo, pueden hablar con ellos sobre sus sentimientos y asegurarles que sus amigos también los van a echar de menos. Esto puede ayudar a que se sientan comprendidos y apoyados. 

Porque lo cierto es que el fin de curso no tiene por qué significar el fin de las amistades. Con un poco de planificación y apoyo, las familias pueden ayudar a mantener estos vínculos tan valiosos. Así, aseguramos que las niñas y niños disfrutan de un verano lleno de alegría y compañía. Fomentar y mantener estas relaciones a lo largo de los años es una de las cosas más hermosas y valiosas que podemos hacer por nuestros hijos e hijas.